Buscar este blog

martes, 21 de agosto de 2012

VICO O LA VISION RENACENTISTA


El autor en este capítulo tiene como objetivo el explicar el alcance histórico de la obra de Juan Bautista Vico y la influencia de su pensamiento en su época.
La visión Renacentista de vico se formula a partir de la peripecia humana, como consecuencia de la primitiva visión Cristiana de la Historia, la cual fue el anuncio del final del drama humano. Y sin embargo, por encima de tales angustias, la Historia proseguía y aun podía decirse que se hacía cada día mas rica en posibilidades (Historia continua).  Este paradójico rejuvenecimiento del mundo es lo que imprime el carácter de la visión histórica de Vico. En este rejuvenecimiento de la Nueva Visión, es la experiencia de la renovación.
La Visión de Vico fue la sazón nueva “la nueva ciencia”, que aparece en su primera redacción después de casi un siglo de los discursos de Galileo y de Descarte sobre algo que es llamado también la “la nueva ciencia”,(la ciencia matemática de la naturaleza), se le reconoce como ciencia solo a la Física y no a la Historia.  Vico sostiene una extraña teoría del conocimiento,  para Vico, la mente humana es ante todo una sustancia racional, una cosa que piensa; en cambio, la mente no es ninguna cosa, porque no posee la razón, sino que se limita a participar de ella.  Considerando a la ciencia humana como la limitación de la Ciencia Divina.  Solo hay dos cosas que el hombre verdaderamente hace: una de ellas es la matemática, la ciencia de lo abstracto; otra es la Historia, el saber de lo más concreto, solo para ellas hay criterios de verdad absoluta.  Y por lo tanto, absoluta y verdadera ciencia.  La ciencia es, ante todo, para Vico, al revés que para sus contemporáneos, ciencia de los objetos no físicos, ciencia de la realidad espiritual.
Vico hace, no una teología, ni siquiera, como hoy se dice, una psicología, sino una física de la historia.  Lo que él pretende es, en efecto, establecer los principios de la “historia ideal eterna”.  Para él la historia es solo una de las bellas artes, afirma que si hay un saber inseguro e improbable es precisamente el saber de la naturaleza.  Parece ver en la obra de Vico unas nupcias de la naturaleza con la historia, que tal matrimonio es la consecuencia del rapto de la primera por la segunda, pues solo por la historia puede la naturaleza y, sobre todo la naturaleza humana, ser penetrada y comprendida.
El considera que hay un poder extraño al mundo y superior a él para que la sociedad humana subsista en orden, es decir con Dios y resume que la historia humana es como un rio y cuyos desbordamientos se llaman crisis y cuyos recodos marcan los principios de nuevas etapas.  La historia es una serie de cursos y recursos, un vivir encajonado en una libertad que existe solo porque hay, a derecha y a izquierda, las riberas de una inexorable fatalidad.
También indica que la suprema providencia debe vigilar el curso y recursos de la historia humana para que ningún desorden sea permitido.  Para Vico el hombre vive dentro de un cauce que la historia ha excavado y no puede escapar de la trasgresión que va: de una violenta restitución del orden establecido, o de una desorientación que es la muerte.
En el transito del orden al desorden y de este a un orden nuevo en el tiempo, pero antiguo en la idea, es lo que se llama los cursos y recursos de la historia humana.  Es por esta razón la Visión histórica de Vico, una Visión Renacentista, no solo por ser la culminación teórica de ciertas experiencias (ideas claras y distintas) que alborearon en el Renacimiento, sino también porque su eje lo constituye la fe en el renacimiento perpetuo de la especie humana.  La historia ha nacido una sola vez con la creación de hombre, pero ha renacido muchas veces y parece ir en camino de un renacimiento perpetuo (perpetua destrucción y reconstrucción en si misma).
En síntesis en esta Visión la Historia se convierte en un expediente de la especie humana y el recurso es instancia de apelación, la renovación constante de ese expediente.  La verdad de la historia es su agonía, la realidad de la historia su lucha.  En la agonía hay vida y la vida hay esperanza; seguir viviendo en el consuelo, resistir es la lucha y la esperanza.  La vida es negarse a morir, y la historia es vida.  Según Ferrater la Visión de Vico es magnánima y tranquilizadora, si la historia es un expediente, al menos se tiene y mantiene la confianza en la renovación perpetua. La filosofía de la historia de Vico es la filosofía de la historia de los pueblos que se niegan a morir.

[1] FERRATER José, “Vico o la visión renacentista”, en: CUANTRO VISIONES DE LA HISTORIA UNIVERSAL, Alianza editorial, S.A,  Tercera Edición, Madrid, 1996, pp 49-68.

No hay comentarios:

Publicar un comentario